Mi perro nunca me haría lo que tú me hiciste
Mi perro nunca me haría
lo que tú me hiciste
Jugaste y engañaste
todo lo que pudiste
Pero tú no eres tan buena
para andar fingiendo
Te enredas en tu propia cuerda
y terminas en el suelo
Te persigues la cola,
como mi perro
Te revuelcas en el suelo,
como mi perro
Llegas como si nada
a pedirme cariño
Con esa cara tierna
y tu alma de niño
Pero no eres mi perro,
por eso para ti
aquí ya no hay amor
Mi perro es mucho más fiel
de lo que tú fuiste
Y no hablo de sexo,
hablo de los dramones
en los que me metiste
Mi perro podrá ser follón
pero es transparente
Pero tú de tantas mentiras
ya ni sabes quién eres
Te persigues la cola,
como mi perro
Te revuelcas en el suelo,
como mi perro
Llegas como si nada
a pedirme cariño
Con esa cara tierna
y tu alma de niño
Pero no eres mi perro,
por eso para ti aquí
ya no hay amor
Te persigues la cola,
como mi perro
Te revuelcas en el suelo,
como mi perro
Llegas como si nada
a pedirme cariño
Con esa cara tierna
y tu alma de niño
Pero no eres mi perro,
por eso para ti aquí
ya no hay amor
lo que tú me hiciste
Jugaste y engañaste
todo lo que pudiste
Pero tú no eres tan buena
para andar fingiendo
Te enredas en tu propia cuerda
y terminas en el suelo
Te persigues la cola,
como mi perro
Te revuelcas en el suelo,
como mi perro
Llegas como si nada
a pedirme cariño
Con esa cara tierna
y tu alma de niño
Pero no eres mi perro,
por eso para ti
aquí ya no hay amor
Mi perro es mucho más fiel
de lo que tú fuiste
Y no hablo de sexo,
hablo de los dramones
en los que me metiste
Mi perro podrá ser follón
pero es transparente
Pero tú de tantas mentiras
ya ni sabes quién eres
Te persigues la cola,
como mi perro
Te revuelcas en el suelo,
como mi perro
Llegas como si nada
a pedirme cariño
Con esa cara tierna
y tu alma de niño
Pero no eres mi perro,
por eso para ti aquí
ya no hay amor
Te persigues la cola,
como mi perro
Te revuelcas en el suelo,
como mi perro
Llegas como si nada
a pedirme cariño
Con esa cara tierna
y tu alma de niño
Pero no eres mi perro,
por eso para ti aquí
ya no hay amor